Ingredientes:
1
cabeza de ajo (8-10 dientes de ajo)
200
ml. de vino blanco
150
ml de aceite de oliva virgen extra
Un
ramillete de tomillo fresco (opcional)
Sal
y pimienta negra recién molida (al gusto)
Para
la guarnición: 4 patatas medianas
Elaboración:
Aderezamos
el conejo con sal y pimienta y lo reservamos.
En
una cazuela plana, ponemos el aceite y calentamos a fuego medio. Añadimos los
ajos y bajamos el fuego para que se tuesten ligeramente, pero sin que se
quemen.
Tras
unos minutos los retiramos y reservamos.
Subimos
el fuego y comenzamos a freír el conejo vuelta y vuelta, hasta que los trozos
queden doraditos.
Incorporamos
el vino y dejamos cocer para que el alcohol se evapore. Obtendremos una salsa
que se habrá formado entre el aceite, el vino y los jugos que fue soltando el
conejo.
Incorporamos
los dientes de ajo que teníamos reservamos y opcionalmente podemos añadir un
poquito de tomillo.
Tapamos
y cocinamos a fuego medio unos 20 minutos. A mitad de la cocción le damos la
vuelta para que la carne cueza por igual.
Servimos
y adornamos con perejil picado.
Consejo: Podemos acompañarlo de patatas
panadera, ensalada mixta, arroz blanco, etc..